(si vais a discutir sobre Penrose, avisadme, que entro a saco; por supuesto, Penrose se equivoca, muy probablemente, e incluso si terminase teniendo razón, la tendría por causas equivocadas)
(y a pesar de lo anterior, es una de las mentes más potentes de estos tiempos)
Enhorabuena por la entrevista. Muy buena la respuesta sobre el tema Penrose. Una forma simple y elegante de resolver el caso. Curiosamente una Profesora de física, Sonia Fernández, recientemente ha vuelto a mencionar la posibilidad de que sea la física cuántica la que nos ayude a entender el funcionamiento del cerebro- Felicidades por la entrevista.
... de todas maneras, el problema de Penrose no tiene nada que ver con la física, sino con las matemáticas. Todo parte de una interpretación incorrecta de las consecuencias del teorema de Gödel para la inteligencia humana. Desmontas el equívoco, y el resto de la argumentación se cae por su propio peso.
Es uno de los formalismos que se están desarrollando para explicar el espaciotiempo como un modelo algorítmico. Esto no quiere decir que el QG, en concreto, sea el modelo del universo, por supuesto. Pero que es posible y muy probable que las leyes continuas que ahora tenemos sean un fenómeno emergente de un modelo discreto.
Como curiosidad, en estos modelos las partículas elementales son modos de excitación de los nodos del grafo (al igual que partículas virtuales como el fonón). Existen modelos "background-independent" y otros que asumen un espaciotiempo plano inicial. Los que molan, claro, son los primeros: es la famosa idea de Wheeler sobre la "geometrogénesis".
(tiene cierta gracia que sea una chica griega, Fotini Markopoulou, quien esté dando caña en estos temas; "geometrogénesis" es una palabra que le hubiese gustado al marica de Platón, aunque como filósofo pedorro, no se hubiese enterado muy bien de qué iba el asunto)
Porque la decoherencia cuántica desmontaría toda relación entre consciencia y estados cuánticos. Temperatura y cantidad de átomos en interacción lo hacen muy, pero que muy improbable.
Experimentadamente es casi imposible (casi, por no ser dogmático) que efectos cuánticos jueguen un papel determinante en los procesos de la mente.
Por el tamaño (número de partículas) y temperatura a la que se encuentra el cerebro es casi imposible que dichos efectos cuánticos se mantengan y, por lo tanto, que permitan explicar la consciencia, el libre albedrío o la razón. La consciencia se genera en las redes neuronales (en el bucle tálamo-cortical, concretamente), no en las partículas del cerebro.
El entrelazamiento cuántico es muy sensible a cualquier interacción con el medio ambiente; por todo ello es tan difícil construir un ordenador cuántico.
Por consiguiente, la explicación última de la mente aún no determinada con acribia, se encontrará en las ondas cerebrales y en el comportamiento caótico de los circuitos neuronales.
Experimentadamente es casi imposible [...] que efectos cuánticos jueguen un papel determinante en los procesos de la mente.
Entonces es que no te has leído a Penroso o (por no ser dogmáticos) no te lo has leído bien. Penrose tiene su propia explicación del asunto. Otra cosa es que no sea así, pero por toda una serie de razones anteriores.
Si es idea de una mujer, seguro que debe de haber algún error
Pues ahí tienes el caso de Emily Noether. Aunque, para ser sinceros, y de creer a sus biógrafos, tenerla al lado era como tener a un tío. Eructaba, se pringaba la ropa comiendo bocatas grasientos, y no se cambiaba la ropa interior hasta que empezaba a fermentarse.
Primero tienes que hacerte una idea sobre qué aspecto puede tener la teoría que buscas. La inteligencia humana, la investigación científica y todas esas cosas, son frutos de búsquedas heurísticas. Tener una idea sobre qué buscas te ahorra mucho tiempo... aunque no te garantice nada, claro.
Hasta ahora, las leyes de la Física se escriben como ecuaciones diferenciales que trabajan sobre engrudos y guarrerías más o menos continuas (incluso en el caso cuántico, en el que hubo que inventar tontadas como la función delta de Dirac). Lo que hace esta gente (y en lo que trabaja también la peña de la "materia condensada") es plantear modelos matemáticos que produzcan, en el límite, modelos cuasicontinuos como los de la física "patanegra".
De momento, esto es Matemáticas (con una fuerte inspiración física). Quizás todavía no estemos en el nivel de organización de las cosas algorítmico, y es posible que aparezcan todavía un par de teorías físicas con pintas más o menos tradicionales (la teoría de supercuerdas, si algún día llega a funcionar, por ejemplo, va en este rumbo). Pero la intuición generalizada es que llega un momento en el que tienes que pasar a una descripción digital, discreta y finita para explicar las cosas.
¿Y cuál es el equivalente a nivel discreto de las simetrías continuas como la de Poincaré o las simetrías gauge? ¿O es que solo se recuperan las simetrías en un límite continuo?
Por cierto, Jesús, ha sido un placer leer la entrevista.
Se recuperan en el límite de "baja temperatura"... al menos, unas cuantas de ellas. Creo que con la "quantum graphity" se ha demostrado que emergen los fotones.
Lo de la "baja temperatura" es interesante: el truco está en cuantizar los estados de los nodos, y asignar un hamiltoniano con una serie de propiedades razonables (es decir, el modelo sigue siendo no determinista, lo cual es bastante razonable). En la QG, en concreto, en el cálculo de la energía intervienen los bucles cerrados que se forman en el grafo. Y la gracia está en que, a pesar de tratarse de nodos que evolucionan en paralelo, globalmente (lo que yo llamo el modelo del Chino Cudeiro), surgen comportamientos locales.
Lo que no está claro en QG es cómo emerge la métrica (o una conexión). Pero creo que eso sí se consigue en otro modelo, el de Causal Quantum Histories (que no he visto todavía).
También es curioso cómo se relacionan, en el fondo, todas estas cosas. Lo de las Causal Quantum Histories tiene bastante que ver con el enfoque (continuo) de los famosos twistors de Penrose... que a su vez, Witten estaba intentando meter en las supercuerdas.
“Y mi tesis era que en realidad no tenemos absolutamente ni idea -desde el punto de vista científico- de cómo es el cerebro en sus aspectos cualitativos. Ni del cerebro ni de ningún objeto del universo. Lo único que podemos conocer científicamente de los objetos del universo son sus aspectos formales, es decir, podemos decir qué ecuaciones los describen más o menos adecuadamente, pero no podemos decir qué cualidades tienen...” No entiendo este fragmento. ¿Qué se entiende aquí por “aspecto cualitativo”, “tener una cualidad”, o “realidades del tipo cualitativo”? Yo suelo usar “cualidad” como “propiedad”, pero supongo que acá tiene otro significado, porque en el sentido de “propiedades”, creo que podemos estudiar los “aspectos cualitativos” del cerebro. ¿Hay alguna forma de clarificar de qué se habla cuando se habla del “aspecto cualitativo”?
¿En qué sentido de “cualitativo” se afirma que “la ciencia no estudia los aspectos cualitativos”? Si “cualidad” se entiende como “característica”, podría objetarse que la neurociencia sí estudia las características del cerebro. Si “cualitativo” se entiende como “subjetivo”, podría objetarse que la psicología estudia (mediante testeo de hipótesis) las experiencias subjetivas en los seres humanos y en otras especies (e.g. “teoría de la mente” en primates no humanos).
¿En qué sentido de “cualitativo” se afirma que “la ciencia no estudia los aspectos cualitativos”? Si “cualidad” se entiende como “característica”, podría objetarse que la neurociencia sí estudia las características del cerebro. Si “cualitativo” se entiende como “subjetivo”, podría objetarse que la psicología estudia (mediante testeo de hipótesis) las experiencias subjetivas en los seres humanos y en otras especies (e.g. “teoría de la mente” en primates no humanos).
Hola, buscador. Precisamente estamos discutiendo este tema en una entrada reciente. http://abordodelottoneurath.blogspot.com/2011/06/es-reducible-la-conciencia-la-materia.html . Lo que quiero decir es que el conocimiento que podemos tener sobre algo equivale a una FÓRMULA. Lo único que sabemos sobre eso que estamos conociendo es que (en el mejor de los casos) ES UN SISTEMA ISOMORFO A ALGUNO DE TODOS LOS SISTEMAS POSIBLES QUE CUMPLEN ESA FÓRMULA. Pero todos esos sistemas se pueden diferenciar en muchas cosas que posiblemente nuestras fórmulas no sean capaces de discriminar. Por lo tanto, en realidad no tenemos ni idea de CÓMO son nuestros cerebros (p.ej.), aparte del hecho de que son describibles mediante ciertas fórmulas. Por lo tanto, ¿por qué no van a ser EXACTAMENTE COMO LOS "CUALIA"?
Seguro que la "pupila" tenía un Norte potente.
ResponderEliminar(si vais a discutir sobre Penrose, avisadme, que entro a saco; por supuesto, Penrose se equivoca, muy probablemente, e incluso si terminase teniendo razón, la tendría por causas equivocadas)
(y a pesar de lo anterior, es una de las mentes más potentes de estos tiempos)
Jordi, lo que tienes tú es un Sur muy dilatado. No confundamos los puntos cardinales, s'il vous plaît.
ResponderEliminarEnhorabuena por la entrevista. Muy buena la respuesta sobre el tema Penrose. Una forma simple y elegante de resolver el caso. Curiosamente una Profesora de física, Sonia Fernández, recientemente ha vuelto a mencionar la posibilidad de que sea la física cuántica la que nos ayude a entender el funcionamiento del cerebro-
ResponderEliminarFelicidades por la entrevista.
En la pregunta sobre Penrose y la consciencia, me extraña que no hayas mencionado la noción de decoherencia cuántica, Jesús.
ResponderEliminarJosé Manuel:
ResponderEliminar¿exactamente con qué objeto?
¿exactamente con qué objeto?
ResponderEliminar¡Para ser coherentes, claro!
... de todas maneras, el problema de Penrose no tiene nada que ver con la física, sino con las matemáticas. Todo parte de una interpretación incorrecta de las consecuencias del teorema de Gödel para la inteligencia humana. Desmontas el equívoco, y el resto de la argumentación se cae por su propio peso.
ResponderEliminarAh, para los aficionados a la Física Teórica:
ResponderEliminarQuantum Graphity
Es uno de los formalismos que se están desarrollando para explicar el espaciotiempo como un modelo algorítmico. Esto no quiere decir que el QG, en concreto, sea el modelo del universo, por supuesto. Pero que es posible y muy probable que las leyes continuas que ahora tenemos sean un fenómeno emergente de un modelo discreto.
Como curiosidad, en estos modelos las partículas elementales son modos de excitación de los nodos del grafo (al igual que partículas virtuales como el fonón). Existen modelos "background-independent" y otros que asumen un espaciotiempo plano inicial. Los que molan, claro, son los primeros: es la famosa idea de Wheeler sobre la "geometrogénesis".
(tiene cierta gracia que sea una chica griega, Fotini Markopoulou, quien esté dando caña en estos temas; "geometrogénesis" es una palabra que le hubiese gustado al marica de Platón, aunque como filósofo pedorro, no se hubiese enterado muy bien de qué iba el asunto)
Porque la decoherencia cuántica desmontaría toda relación entre consciencia y estados cuánticos. Temperatura y cantidad de átomos en interacción lo hacen muy, pero que muy improbable.
ResponderEliminarExperimentadamente es casi imposible (casi, por no ser dogmático) que efectos cuánticos jueguen un papel determinante en los procesos de la mente.
Por el tamaño (número de partículas) y temperatura a la que se encuentra el cerebro es casi imposible que dichos efectos cuánticos se mantengan y, por lo tanto, que permitan explicar la consciencia, el libre albedrío o la razón. La consciencia se genera en las redes neuronales (en el bucle tálamo-cortical, concretamente), no en las partículas del cerebro.
El entrelazamiento cuántico es muy sensible a cualquier interacción con el medio ambiente; por todo ello es tan difícil construir un ordenador cuántico.
Por consiguiente, la explicación última de la mente aún no determinada con acribia, se encontrará en las ondas cerebrales y en el comportamiento caótico de los circuitos neuronales.
Experimentadamente es casi imposible [...] que efectos cuánticos jueguen un papel determinante en los procesos de la mente.
ResponderEliminarEntonces es que no te has leído a Penroso o (por no ser dogmáticos) no te lo has leído bien. Penrose tiene su propia explicación del asunto. Otra cosa es que no sea así, pero por toda una serie de razones anteriores.
Si es idea de una mujer, seguro que debe de haber algún error
ResponderEliminarPues ahí tienes el caso de Emily Noether. Aunque, para ser sinceros, y de creer a sus biógrafos, tenerla al lado era como tener a un tío. Eructaba, se pringaba la ropa comiendo bocatas grasientos, y no se cambiaba la ropa interior hasta que empezaba a fermentarse.
Pero si nunca vamos a dar con una teoría del todo
ResponderEliminarPrimero tienes que hacerte una idea sobre qué aspecto puede tener la teoría que buscas. La inteligencia humana, la investigación científica y todas esas cosas, son frutos de búsquedas heurísticas. Tener una idea sobre qué buscas te ahorra mucho tiempo... aunque no te garantice nada, claro.
Hasta ahora, las leyes de la Física se escriben como ecuaciones diferenciales que trabajan sobre engrudos y guarrerías más o menos continuas (incluso en el caso cuántico, en el que hubo que inventar tontadas como la función delta de Dirac). Lo que hace esta gente (y en lo que trabaja también la peña de la "materia condensada") es plantear modelos matemáticos que produzcan, en el límite, modelos cuasicontinuos como los de la física "patanegra".
De momento, esto es Matemáticas (con una fuerte inspiración física). Quizás todavía no estemos en el nivel de organización de las cosas algorítmico, y es posible que aparezcan todavía un par de teorías físicas con pintas más o menos tradicionales (la teoría de supercuerdas, si algún día llega a funcionar, por ejemplo, va en este rumbo). Pero la intuición generalizada es que llega un momento en el que tienes que pasar a una descripción digital, discreta y finita para explicar las cosas.
¿Y cuál es el equivalente a nivel discreto de las simetrías continuas como la de Poincaré o las simetrías gauge? ¿O es que solo se recuperan las simetrías en un límite continuo?
ResponderEliminarPor cierto, Jesús, ha sido un placer leer la entrevista.
Se recuperan en el límite de "baja temperatura"... al menos, unas cuantas de ellas. Creo que con la "quantum graphity" se ha demostrado que emergen los fotones.
ResponderEliminarLo de la "baja temperatura" es interesante: el truco está en cuantizar los estados de los nodos, y asignar un hamiltoniano con una serie de propiedades razonables (es decir, el modelo sigue siendo no determinista, lo cual es bastante razonable). En la QG, en concreto, en el cálculo de la energía intervienen los bucles cerrados que se forman en el grafo. Y la gracia está en que, a pesar de tratarse de nodos que evolucionan en paralelo, globalmente (lo que yo llamo el modelo del Chino Cudeiro), surgen comportamientos locales.
Lo que no está claro en QG es cómo emerge la métrica (o una conexión). Pero creo que eso sí se consigue en otro modelo, el de Causal Quantum Histories (que no he visto todavía).
También es curioso cómo se relacionan, en el fondo, todas estas cosas. Lo de las Causal Quantum Histories tiene bastante que ver con el enfoque (continuo) de los famosos twistors de Penrose... que a su vez, Witten estaba intentando meter en las supercuerdas.
“Y mi tesis era que en realidad no tenemos absolutamente ni idea -desde el punto de vista científico- de cómo es el cerebro en sus aspectos cualitativos. Ni del cerebro ni de ningún objeto del universo. Lo único que podemos conocer científicamente de los objetos del universo son sus aspectos formales, es decir, podemos decir qué ecuaciones los describen más o menos adecuadamente, pero no podemos decir qué cualidades tienen...”
ResponderEliminarNo entiendo este fragmento. ¿Qué se entiende aquí por “aspecto cualitativo”, “tener una cualidad”, o “realidades del tipo cualitativo”? Yo suelo usar “cualidad” como “propiedad”, pero supongo que acá tiene otro significado, porque en el sentido de “propiedades”, creo que podemos estudiar los “aspectos cualitativos” del cerebro. ¿Hay alguna forma de clarificar de qué se habla cuando se habla del “aspecto cualitativo”?
¿En qué sentido de “cualitativo” se afirma que “la ciencia no estudia los aspectos cualitativos”? Si “cualidad” se entiende como “característica”, podría objetarse que la neurociencia sí estudia las características del cerebro. Si “cualitativo” se entiende como “subjetivo”, podría objetarse que la psicología estudia (mediante testeo de hipótesis) las experiencias subjetivas en los seres humanos y en otras especies (e.g. “teoría de la mente” en primates no humanos).
ResponderEliminar¿En qué sentido de “cualitativo” se afirma que “la ciencia no estudia los aspectos cualitativos”? Si “cualidad” se entiende como “característica”, podría objetarse que la neurociencia sí estudia las características del cerebro. Si “cualitativo” se entiende como “subjetivo”, podría objetarse que la psicología estudia (mediante testeo de hipótesis) las experiencias subjetivas en los seres humanos y en otras especies (e.g. “teoría de la mente” en primates no humanos).
ResponderEliminarHola, buscador. Precisamente estamos discutiendo este tema en una entrada reciente.
ResponderEliminarhttp://abordodelottoneurath.blogspot.com/2011/06/es-reducible-la-conciencia-la-materia.html
.
Lo que quiero decir es que el conocimiento que podemos tener sobre algo equivale a una FÓRMULA. Lo único que sabemos sobre eso que estamos conociendo es que (en el mejor de los casos) ES UN SISTEMA ISOMORFO A ALGUNO DE TODOS LOS SISTEMAS POSIBLES QUE CUMPLEN ESA FÓRMULA. Pero todos esos sistemas se pueden diferenciar en muchas cosas que posiblemente nuestras fórmulas no sean capaces de discriminar.
Por lo tanto, en realidad no tenemos ni idea de CÓMO son nuestros cerebros (p.ej.), aparte del hecho de que son describibles mediante ciertas fórmulas. Por lo tanto, ¿por qué no van a ser EXACTAMENTE COMO LOS "CUALIA"?